Y, sí, hablo con el diario del lunes. Pero finalmente, lamentablemente, Las Acacias no fue el éxito que la prensa esperaba, incluso a pesar de la excelente programación que logró Distribution Company para su estreno. ¿Seguimos necesitando evidencia de que estrenar en los multipantallas de Capital no es garantìa de èxito?
Fui a ver la pelìcula un sábado en primera noche en el Showcase Belgrano, creo que era segunda semana. La sala estaba bastante vacía, y el público era la gente mayor que suele acompañar al cine de autor sea la sala que sea. La falta de afinidad con el espacio llegó rápidamente, con los trailers previos a la película, donde se podían ver una detrás de otra películas americanas que, más allá de juicios de valor (aunque, hagámoslos: todas parecían pésimas), no tenían nada que ver con la película íntima y delicada de Pablo Giorgielli.
Insisto: me hubiera gustado que a le peli le vaya muy bien. Pero ahora que no le fue demasiado bien en la taquilla (es evidente que la crìtica y el circuito de festivales se rindieron ante la pelìcula), vale aprovecharlo como un nuevo ejemplo de que, la mayorìa de las veces, estrenar en las llamadas salas de primera línea, puede ser un capricho inútil.